Gameplay e historia.
Nos encontramos ante un juego al más puro estilo aventura con toques de rol en perspectiva cenital que nos llevará a recorrer los episodios y eventos de la tercera temporada de la serie; de hecho es preferible haberla visto antes de jugar, puesto que representa momentos y diálogos idénticos, aunque no es necesario para meterse en su mundo pixelado.
El sistema de juego es simple pero efectivo, como los juegos de la época: ataque, defensa y magia (energía en este caso), con un combate en tiempo real, sin turnos.
Podremos llevar a todo el elenco de protagonistas de la serie, los cuales desbloquearemos según avancemos en la historia, teniendo cada uno de ellos atributos únicos que van desde el puro cuerpo a cuerpo hasta ataques a distancia. Además, cada uno tiene habilidades especiales para acceder a nuevas áreas, previamente inaccesibles.
También iremos fabricando y recogiendo objetos que darán beneficios al grupo o a determinados personajes como más salud, más daño por elemento o defensa.
Por supuesto, como buen juego de aventuras, encontraremos puzles de todo tipo; algunos de los cuales nos llevará un tiempo solucionar, salas secretas con botín, misiones secundarias y coleccionables a modo de enanitos de jardín repartidos por los diferentes escenarios por los que nos desplazaremos.
A todo ello debemos sumar unos combates con jefes finales que suponen un verdadero reto.